En la primera parte del viaje se visita La Isla Norte, donde conviven la cultura maorí, las ciudades modernas y muchos paisajes marcados por la actividad volcánica. Durante este tramo del viaje, van a poder recorrer Auckland, la “Ciudad de las Velas”, recorriendo su puerto lleno de veleros y los parques regionales cercanos, donde se pueden descubrir bosques de kauris, cascadas escondidas y playas de arena negra. 

Para los que les gustan las experiencias gastronómicas, a pocos minutos en ferry, Waiheke Island ofrece un recorrido entre viñedos boutique, aceite de oliva y productos locales, con paisajes de colinas verdes y playas más tranquilas, para todos aquellos que se quieran relajar. 

Para aquellos que prefieren actividades más de aventura, Waitomo y Rotorua ofrecen actividades desafiantes.  Waitomo ofrece sus cuevas iluminadas por millones de luciérnagas y las aventuras del rafting subterráneo. En Rotorua, se puede practicar rafting extremo, mountain bike entre secuoyas y kayak nocturno para llegar a las piscinas termales naturales. 

Más al sur, el Parque Nacional Tongariro invita a recorrer uno de los mejores trekkings del mundo, el Tongariro Alpine Crossing, con cráteres activos, lagunas color esmeralda y vistas panorámicas. 

Finalmente, Wellington combina arte callejero, museos, cafeterías de autor y la historia geológica y cultural del país, cerrando la etapa norte. Esta primera parte abarca los primeros 8 días del viaje. 

En la segunda parte del viaje, se visita la Isla Sur, donde el ritmo del viaje se vuelve más tranquilo. Para cruzar de Wellington a Picton van a navegar entre los fiordos de Marlborough Sounds con montañas que se van hundiendo en el agua. En Marlborough, región reconocida mundialmente por su Sauvignon Blanc, se pueden visitar los viñedos para todos los amantes de lo gourmet, antes de llegar a Nelson, la zona más soleada de Nueva Zelanda. 

Si prefieren conocer alguna playa más exótica, no se pueden perder el Parque Nacional Abel Tasman, que tiene playas de arena dorada, aguas turquesa y bosques costeros para realizar muchas aventuras, como por ejemplo, una jornada de navegación, caminatas suaves y kayak entre bahías tranquilas, donde probablemente se crucen con focas, delfines y pequeños pingüinos azules.

En Nelson y sus alrededores pueden recorrer la mágica Golden Bay, visitar galerías de arte y mercados de artesanías, o simplemente relajarse en playas escondidas y disfrutar de su destacada gastronomía local. Esta segunda parte del viaje se puede recorrer en 3 días aproximadamente.

El último tramo del viaje es la zona de la Isla Sur Alpina, donde hay mucha montaña, lagos y fiordos que ofrecen paisajes espectaculares. Esta última parte del viaje se puede realizar en 4 días aproximadamente. 

En Queenstown, una ciudad rodeada de Alpes del sur y del lago Wakatipu, pueden disfrutar de excursiones de montaña, combinandolas con experiencias gastronómicas de primer nivel. 

Para aquellas personas que les gusta la adrenalina, pueden disfrutar de una actividad en helicóptero por el Fiordland, recorriendo glaciares, montañas escarpadas y cascadas. Esta actividad culmina en un glaciar para poder vivir la experiencia de caminar sobre hielo, con vistas impresionantes del Mitre Peak desde el aire. Las actividades siguen en el río Shotover, con la famosa lancha jet boat, que surca los cañones a toda velocidad y realiza giros de 360 grados.

Si estas interesado en realizar un viaje de este estilo, no dudes en agregar Nueva Zelanda a tu lista de posibles destinos. Con Iunik, te podemos ayudar a organizar día por día tu itinerario para que disfrutes y recorras todos los rincones de este enorme país.